—¿Otra vez estás deprimida? —Le pregunte. ¿Cómo es posible que una persona este deprimida las 24 hs del día?.
—Si y acostúmbrate, yo soy así —Me respondió y se dio vuelta. En ese mismo instante la abrace por la espalda y puse mis manos en su panza, comencé a girar mi dedo índice en su ombligo, pequeños círculos imaginarios, de abajo hacia arriba, muy suavemente.
—Ni empedo —Interrumpió mi pequeño gran comienzo y anulo todas las posibilidades de poder consolarla.
—¿Ni empedo qué? —Me descubrió —pensé.
—Que ni empedo, ya sabes a que me refiero, nada de caricias, besos ni abrazos, ¿No entendes que quiero estar sola?, necesito pensar, creo que ambas personas somos grandes y no tengo que decir “ándate”, como se nota que todavía no aprendiste a tratar a una mujer.
—Ah pero vos no estás deprimida, vos estás mal garchada —Saqué mis manos de su panza y me di vuelta, cerré mis ojos y rezaba que me dijera algo, no quería que me pida disculpas, solo que me diga algo.
—Sí, estoy mal garchada, ¿Sabes por que estoy mal garchada?, por que vos me garchas como el reverendo ojete, por eso y sabes qué, además odio a los hombres y a toda su raza de mierda que lo único que quieren es garchar, todo es garchar y fútbol, una concha de cerebro tienen. Todos pajeritos nenes de mama y cuando llegan a los 30 se piensan que tienen 18 —Empezó a gritar, como siempre, siempre el mismo monologo, siempre igual.
—Ey, vos sabes bien que a mi el fútbol no me va. —Le dije eso y no me pregunten por que pero me empecé a reír.
—Uh encima me deliras, anda a la concha tuya, idiota —Me dijo eso y detono una carcajada —Soy un idiota— pero fue una devolución de favores, ella dijo que la garchaba mal, perra, eso dolió.
Cuando vomito su ultima palabra le encaje un beso que le rompí la boca —apenas, tampoco soy un caníbal— la abrace con fuerza, y comenzó a besarme ella, sí, empezó a besarme como solo ella lo hace.
La desnude de pie a cabeza, el silencio inundo la habitación, un gemido desgarrador hizo temblar los vidrios, es hasta el día de hoy que todavía lo escucho.
Es increíble en la cama, es patética su vida, pero el sexo lo compensa todo, su rechazo hacia los hombres lo creo otro hombre, ¿Te sorprende?.
Por momentos la extraño, en realidad la quiero, pero tiene un temperamento difícil de llevar, es muy… como explicarlo, una nena inocente que se hace la decente, nunca se hace cargo de las cosas, no toma decisiones, no se calienta por nada, así esta, pero me pone un poco mal el saber que ella también quiere solo sexo, me da a pensar que no son solos los hombres los que tienen una concha de cerebro.
Y no dejo de pensar que si el día tuviera 25 o 30 o 40 hs, ella seguiría estando deprimida, nunca se dejo ayudar, se acostumbro a estar mal, se miente y piensa que es feliz, se cree que la vida es como una telenovela, todo color rosa, todavía espera al príncipe azul, cuando sabe bien, que su cuento esta por terminar.
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Mhhhhh, te autorize a escribir sobre mi????, jajajaj, me toco muy de cerca!
Sldos!
dios, se me cayeron lagrimas...no quiero pensar que soy asi, pero me paso!! gracias Cristian..