Y nos ahogamos en silencios, en los que yo escucho a tu corazón y escucho tantas cosas más, tantas sensaciones, a veces creo que me estoy volviendo loco, y no ofrezco resistencia alguna. Nos medimos, y nos atamos con palabras, y me haces mal, y me haces bien, y haces tantas cosas cuando me decís que me extrañas. Y yo vuelo como un nene, y me siento tan bien.
Cuando te vi tan liviana, sentí un brote de pasión, una locura que no puedo describir, como no puedo explicar tantas cosas, que en realidad quizás si las pueda explicar, pero no lo quiero hacer, porque necesito guardarme algo, porque siempre que explique no me fue del todo bien. Y yo no quiero que la noche se acabe, me entendés, yo no quiero que los días pasen, porque la vida pasa, y eso me aterra, que la vida pase, y no creo en milagros, y se que todo pasa, que lo bueno dura poco, sé tantas cosas que de solo pensarlo renuncio a todo.
Renuncio al paso del tiempo. Resigno cualquier idiotez por un minuto con vos.
Me rio cuando te veo porque soy feliz, y no sé de que me rio, son cosas que solo me pasan con vos. Y grito mucho en mi interior, grito que sos hermosa. Que sos única.
Estoy agradecido. Me siento bien, y no quiero pensar en el mañana, porque no hay que pensar en el mañana. Porque todo se va construyendo, por que el futuro se construye a partir de hoy y se que no es fácil comenzar, pero gracias a vos comprendí que nunca es tarde para empezar.  
Y cuando estaba en mi pieza, cuando sentí que el vino no era vino, cuando el aire no era aire, comprendí que estaba incompleto.
Estoy como en una nube en la que no puedo pensar nada, quisiera ser viento, y también quiero disfrutar todo, y a veces se complica, y esas complicaciones me dan más fuerzas. Y yo no sé cuanto daño te haré, y no me importa el daño que vos puedas llegar a hacerme, es que ya no creo más en nadie, pero tuve la suerte de encontrarte.
Corro el riesgo y duermo sin frazadas, camino descalzo sin miedo a enfermarme, y el frío es compañía, y yo te veo en todos lados.
Solo quiero una tregua para soñar un poco más. Solo quiero saber si a vos te pasa lo mismo que a mí. Si tus miedos son amigos de los míos, si nuestra verdad existe. Y no quisiera que me lo confirmes, quisiera descubrirlo y quisiera despertarme todos los días con vos.
Esta todo tan difícil, pero si sobrevivimos hasta ahora, ya sabes nena, es imposible que paren tu sonrisa, nadie puede parar a tu mirada, y no hay muros que me impidan verte.
Te di doce horas para que lloviera, faltan once, y hay muchas estrellas. Anda a comprar el vino, brindaremos por lo que no supimos brindar la última vez.
Capitana, genia, boni-boni, la canción más hermosa.